Cinco robos diarios en viviendas

El balance de criminalidad del primer trimestre recoge un aumento del 27 % en las sustracciones con fuerza en domicilios y alcanza ya las 428

La crisis ha puesto en jaque la seguridad. La vivienda, que hasta ahora era una frontera casi inquebrantable para el ladrón, está en el punto de mira. En el primer trimestre del año los robos con fuerza en domicilios se han incrementado un 27,8 % hasta situarse en los 428. La media deja un resultado escalofriante en la provincia. El balance de criminalidad del Ministerio de Interior recoge una media de cinco robos diarios de este tipo, mientras en el mismo período del pasado año no se llegaba a cuatro.

El rural sufre más esta lacra de los robos en domicilios, pero además de estas zonas, las viviendas del área urbana también son objeto de deseo para el ladrón. El mes pasado aprovechando las vacaciones de Semana Santa entraron en tres pisos del Paseo de Colón para pertrechar sendos robos. Es solo un ejemplo de una lista interminable.

Gasolineras, estancos, farmacias, restaurantes o tiendas de informática, entre otros, se han convertido en protagonistas negros de esta crisis. El balance de criminalidad también recoge un incremento del 21,5 % en los robos con fuerza y del 14, 4 % los que son con violencia e intimidación. Estos delitos alcanzan los 1.319 y 135, respectivamente. Sin ir más lejos, la pasada semana una vecina de Moraña sufrió un asalto en su vivienda después de que unos hombres que se hicieron pasar por policías llamasen a su puerta. En el momento de abrirles, entraron en la vivienda y se llevaron numerosos objetos. La provincia sufre una media de 15 robos con fuerza al día. Barro es uno de los más afectados de la comarca, al registrar en días pasados cuatro robos y asaltos en restaurantes de la zona en 48 horas. En uno de ellos dispararon a una de las propietarias de una bocatería a la salida del local.

Los únicos datos que rompen la tendencia alcista en la provincia de Pontevedra son los delitos por tráfico de drogas, que caen un 50 %, desde los 59 a 29, y los de daños, que reflejan una ligera caída del 3,6 %, hasta situarse en los 1.031 delitos por daños.