El futuro de la industria en la comarca pasa por políticas de economía circular

Expertos destacan la implicación de Ence en la minimización del impacto ambiental

Los proyectos y políticas de economía circular -que priman el respeto por el entorno y la racionalización de los recursos- marcan la estela a seguir en materia ambiental para las industrias de la comarca. Su ejecución es cómo la rúbrica de un matrimonio entre industria y medio ambiente que debe aspirar a ser mucho más que una mera unión de conveniencia. Esta es la actitud que se extenderá cada vez más y no solo por la presión social, sino porque las empresas están tomando conciencia y la iniciativa en la aplicación de medidas de sostenibilidad económica y ecológica. El futuro empresarial en Galicia y en el mundo pasa, necesariamente, por ahí.

Esta es una de las conclusiones a las que llegaron los participantes en una mesa redonda en el marco de Foro Voz, celebrado este martes en Pontevedra. Estuvieron presentes Xavier Niell Castaneda, catedrático emérito de Ecología de la Universidad de Málaga y durante muchos años trabajador del CSIC en el Instituto de Ciencias do Mar, en Bouzas; David Cartelle, director de Troposfera, una consultora dedicada a la gestión de la calidad del aire; Carlos Casas de Ron, director de Calidad y Medio Ambiente de la fábrica de Ence en Pontevedra; y Xosé Manuel Rosas, patrón mayor de Bueu. Eugenio Giráldez fue el moderador de este panel de especialistas.

Compatibilidad con la pesca

Sobre la mesa y como ejemplo a debatir se encontraba la gestión ambiental de la factoría de Ence en Lourizán, como paradigma de la visión actual de la industria pontevedresa. Giráldez lanzó el guante sobre la economía circular, que destacó como un concepto fundamental, al entender de estos técnicos, para cumplir con los criterios de una empresa moderna. Los participantes representaban varios sectores íntimamente ligados con la ría de Pontevedra en la pesca, la innovación tecnológica y la investigación científica.
En el ámbito ambiental, la flota artesanal y el marisqueo dependen mucho del estado de las aguas de la ría, donde también remata el efluente de la industria, así como los vertidos de las depuradoras. Xosé Manuel Rosas destacó que Ence hace tiempo que no figura entre las prioridades que preocupan al sector en la ría, precisamente por la aplicación de medidas que han mejorado de forma sustancial la gestión de los recursos de la fábrica, minimizando su impacto en el entorno. «Ence ya no supone ninguna amenaza, ni esta empresa ni ninguna otra que cumpla los parámetros ambientales», precisó el patrón mayor.

Sellos de calidad

La aplicación de los criterios de economía circular y sus consecuencias en el medio ambiente los detalló con más precisión Carlos Casas de Ron. El director de Calidad y Medio Ambiente de la fábrica incidió, por ejemplo, en que se ha logrado una continua reducción del consumo de agua del Lérez en el complejo de Lourizán. Estos proyectos han permitido reducir el consumo de agua en un 12 %, pero Casas añadió que cuando se implanten todas las medidas del Nuevo Ciclo de Agua, la dependencia del Lérez bajará hasta en un 40 %. Por su política ambiental, además, Ence acumula reconocimientos como la distinción de oro de la Comisión Europea o el sello Nordic Swan, creado por los países escandinavos como marca de calidad ambiental.

Otro ejemplo de compromiso ambiental se encuentra en el aprovechamiento de la materia prima -la madera- para hacer pasta de papel, mientras que la lignina y la biomasa se destinan para la producción de energía. Recientemente los esfuerzos ambientales de Ence también se vieron premiados con una distinción por parte de Aenor, dentro del programa Residuos Cero. El complejo de Lourizán es capaz de reutilizar hasta el 99 % de sus residuos.

https://www.lavozdegalicia.es/noticia/pontevedra/pontevedra/2019/0/31/futuro-industria-comarca-pasa-politicas-economia-circular/0003_201907P31C3991.htm