La valoración de Hacienda es un 18% más que alta que hace una década, cuando se cifraba en 39.000 euros | El municipio suma 41.400 unidades residenciales en el Catastro, el 55% del total
Vista general de la ciudad, con numerosos edificios de viviendas / Rafa Vázquez
El Concello desarrolla de septiembre a noviembre de cada año el cobro del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI), que se calcula en función del valor catastral que el Ministerio de Hacienda asigna a cada bien inmueble del municipio. Ese plazo está a punto de concluir con una previsión de recaudación de 18,4 millones de euros, por encima de los 17,8 millones del año pasado, lo que sitúa a este impuesto como una de las principales fuentes de financiación del Concello.
Según el último balance del Catastro, actualizado al actual año 2024, el censo de unidades catastrales se sitúa en 74.227 altas, ligeramente por debajo de las 75.415 unidades con las que se cerró el pasado año. De hecho, las cifras de hace casi diez meses significaban la lista más alta hasta el momento, después de superarse en 2022 las 75.000 altas. El Ministerio de Hacienda asigna a todas estas propiedades un valor que roza ya los 3.000 millones de euros. En concreto, son 2.971 millones, 2.940 millones, treinta más que en 2023 y un 24% más que hace una década, cuando apenas se llegaba a 2.400 millones. Hacienda calcula una nueva revalorización general ya que sube el importe general, pese a caer el censo.
Hacienda cataloga 2.511 unidades industriales, mil menos que hace un año
Buena parte de estas cifras corresponde a los inmuebles de uso residencial, ya que son 41.437, 41.465, lo que significa un pequeño descenso de 28 con respecto a las cifras de hace un año. Este uso acapara el 56% del total). Pese a esa ligera caída, su tasación se dispara hasta los 1.915 euros, 25 más que a finales de 2023. Esto significa que Hacienda valora en 46.216 euros, 600.000 euros más que en el anterior censo, cada vivienda incluida en el listado catastral. En una década se ha revalorizado un 18%. En 2014 apenas se superaban los 39.000 euros por unidad residencial. A estas cifras se deben añadir las plazas de garaje (que el Catastro identifica como “almacén o estacionamiento”, que añaden otras 22.7663 altas, también el número más alto de los últimos años.
Los 74.227 bienes están tasados con un valor catastral total de 2.971 millones de euros, lo que supone una cifra media de algo más de 40.000 euros cada uno.
Hacienda cataloga 2.511 unidades industriales, apartado donde se produce el más drástico descenso ya que son mil menos que hace un año, mientras que hay 3.283 locales comerciales. Un dato muy llamativo del padrón catastral es el relativo a los edificios singulares, ya que son 21 y su valor total se dispara ya que pasó en un año de 30,9 millones a más de cuarenta.
Otro aspecto relevante de las estadísticas de este año con las que se elabora el padrón del IBI es el relativo a los denominados Bienes Inmuebles de Características Especiales (BICE), donde figuran las autopistas, los parques eólicos, los aeropuertos o los puertos comerciales. En este último caso, aparece el Puerto de Marín repartido entre este municipio y el de Pontevedra, con la capital con un mayor porcentaje de bienes.
Según el Catastro, de las 216 unidades sujetas al IBI en el recinto portuario, 159 corresponden a Pontevedra y solo 57 a Marín, con una tasación de 34,5 y 15 millones de euros respectivamente. El dato resulta llamativo si se tiene en cuenta que Marín reclama desde hace años la plena titularidad del Puerto, pero el proceso de deslinde acumula una prolongada paralización.
Primer recibo completo de la AP-9: 315.000 euros
El recibo del IBI de la AP-9 en Pontevedra pasará de los 16.000 euros de años anteriores a 314.801 al caducar la bonificación del 95% de la que gozaba esta infraestructura hasta ahora. La autopista cotiza como Bien de Características Especiales (BICE), un apartado en el que está previsto recaudar unos 644,400 euros, casi el doble que hace un año. Y es que el recibo de la AP-9 dispara esa recaudación. Este capitulo también incluye tres valores más añadidos este año. Según explica el Concello, dos de ellos son de 737,49 y 173,48 euros y un tercer recibo de 79.187,51 euros está a nombre de la Secretaría de Estado de Transportes.
Hasta 2023, los concellos estaban obligados a bonificar el IBI con el 95% por una ley franquista, de 1972, la Ley de Autopistas. Un Real Decreto de 2000 estableció en la cláusula veinte que ese beneficio del 95% caducaría “a partir del día 19 de agosto del año 2023 inclusive”, en el caso gallego. Son 38 los concellos en Galicia que ven así incrementar su recaudación a cuenta de Audasa, y la empresa calcula que habrá de abonar ahora siete millones de euros en total. Caldas de Reis, en Pontevedra, de menos de 10.000 habitantes, pero con quince kilómetros de autopista podría pasar de ingresar unos 15.000 euros a 330.000 euros de ingreso, una cifra que Barro calcula en 187.661 euros, mientras que Poio pasará de apenas 1.700 euros a unos 34.000, aunque, sin duda, los más beneficiados son la capital de provincia y Vilaboa.El gobierno pontevedrés había intentado, sin éxito, reclamar ante los tribunales, este impuesto, y recibe ahora 314.000, cifra que supera Vilaboa, al pasar de 23.200 a unos 464.000.
El padrón del Impuesto de Actividades Económicas del municipio supera los mil recibos y los 2,3 millones de euros
El Concello acaba de poner al cobro el Impuesto de Actividades Económicas (IAE), un tributo que se aplica a aquellas empresas que facturan más de un millón de euros al año y que en el caso de Pontevedra cuenta con un padrón de 1.035 recibos y una recaudación prevista de 2.337.000 euros.
Los más de mil recibos se aplican a las empresas en función de sus locales o instalaciones, de modo que un mismo banco, por ejemplo, puede pagar varios recibos si tiene más de una sucursal. Además, es la cifra más alta de los últimos años, tanto en recibos como en recaudación.
Son las empresas de promoción inmobiliaria las más abundantes, con 45 locales, superando en el primer puesto a los bancos, que solían encabezar este listado, pero que ahora caen al cuarto lugar, con 25 sucursales. En 2018 eran casi el doble, un total de 45, pero las fusiones y cierres de oficinas bancarias han hecho mella en el censo.
Ahora son los comercios de ropa (de multinacionales) los que están en segundo lugar con 33 establecimientos y otras 29 altas corresponden a concesionarios de automóviles y superan la veintena los bares y cafés, una cifra similar a la de venta de alimentos y de productos de confitería y lácteos. En total, los 1.035 recibos corresponden a 229 epígrafes o actividades económicas distintas
El IAE es uno de los impuestos, que como la mayoría de las tasas y tributos del Concello, están congelados desde hace años. Desde 2013 el gobierno local viene realizando un mayor esfuerzo inspector para evitar el fraude.
https://www.farodevigo.es/pontevedra/2024/10/20/pontevedra-ultima-cobro-ibi-medio-109775423.html
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