Alcaldes veteranos como Nito Sobral, Jorge Canda, Juan Manuel Rey o Telmo Martín aspiran a reeditar mandatos el próximo 26M
¿Debe un alcalde plantearse la retirada de la actividad pública a partir de una cierta edad? Ejemplos como Nito Sobral, en Poio, y Juan Manuel Rey, en Caldas de Reis, ambos con 66 años, acreditarían que no. Tanto ellos como otros más de la comarca de Pontevedra con menos edad pero ya varias reelecciones acumuladas, son marcas propias. Constituyen un elenco tan diverso e intergeneracional que simbolizan desde Miguel Anxo Fernández Lores hasta Jorge Canda, pasando por los más jóvenes, pero veteranos, como María Ramallo, Félix Juncal o Jorge Cubela.Hay quien incluso demuestra una sorprendente capacidad de resurrección política. Telmo Martín es el caso más palmario, pues regresó a la alcaldía de Sanxenxo, a través de una moción de censura extraña, doce años después de haber renunciado. Por medio el doble intento frustrado de ganar la alcaldía de la capital de la provincia y la posterior etapa en Madrid, en un escaño del Congreso de los Diputados. El próximo 26M, Telmo se enfrentará a una jauja de candidaturas como nunca en esa villa persiguiendo un cuarto mandato desde 1999.
Se ha dicho siempre que los comicios municipales son diferentes a todas las demás elecciones; que se valora al candidato por encima de las siglas; que son votaciones transversales y menos ideologizadas. Seguramente, esas y otras razones justificarían el éxito de estos viejos rockeros de la política pontevedresa.
Eternos Nito y Canda
Todos
aquellos vecinos y vecinas de Poio que tengan 24 o menos años de edad,
no han conocido otro regidor que no sea Luciano Sobral. Nito acumula dos
docenas de años al frente de ese Ayuntamiento y va a por un séptimo
mandato. Es junto con Miguel Anxo Fernández Lores, los dos
representantes de los chicos de oro del BNG. No hay otros casos
similares entre alcaldes nacionalistas, pues Paco García, en Allariz
(Ourense), se retiró hace unos meses después de 18 años al frente del
concello alaricano, modelo para los nacionalistas.Otro de los viejos rockeros de la política municipal de la comarca es Jorge Canda. También el caso más camaleónico. Procedente del extinto CDS que fundó Adolfo Suárez, Canda llegó en 1999 a la alcaldía de A Lama con el PSOE. Fue el primero de sus cinco mandatos. Desde el 2003 que se pasó con todos sus concejales al PP, ha empalmado victoria tras victoria con porcentajes de voto de hasta el 50 % de los sufragios emitidos. Sus vecinos no le han recriminado su zigzagueante trayectoria política otorgándole triunfos aplastantes. El próximo 26M, Canda pretende su sexto mandato.
La pequeña Andalucía
Otro
ganador nato es Juan Manuel Rey, alcalde de Caldas de Reis desde el 2006
cuando hubo de relevar a José María Tobío, quien renunció antes de
concluir aquella legislatura. Desde entonces venció en los comicios del
año 2007, el 2011 y el 2015. Y se propone reeditar por cuatro años más.Ya jubilado como profesor, Rey renunció a su sueldo como alcalde (del orden de 42.000 euros anuales). Constituye un pilar electoral importantísimo del PSOE para intentar revalidar la Diputación Provincial. De hecho, Caldas es como una pequeña Andalucía: en 40 años de elecciones municipales democráticas solo ha habido regidores socialistas.
Otro fortín electoral del PSOE es Vilaboa, donde José Luis Poceiro ha concatenado cuatro mandatos consecutivos desde el 2003, contando siempre con el apoyo del BNG, que entró en los gobiernos de coalición. Sin embargo, la tardanza en ser confirmado como candidato a la reelección ha inducido la sospecha creciente de que quizás Poceiro no vaya al frente de la lista el próximo 26M.
Casos antípodas
Entre
munícipes del Partido Popular que ya han cumplido los 70 se dan casos
antípodas en esta ocasión. Julio Sayáns, después de nueve mandatos
consecutivos, 36 años como alcalde de Campo Lameiro, ha decidido echarse
a un lado y dejar paso a Carlos Costa, uno de sus principales
colaboradores.En cambio, José Antonio Landín Eirín, también septuagenario, médico ya jubilado, con ocho mandatos como alcalde, quiere intentar recuperar el bastón de mando de Barro, rivalizando en las urnas con el actual regidor, Xosé Manuel Fernández Abraldes, del BNG.
Hay también quienes sienten que pasados los 60 es mejor dar paso. Es el caso de Víctor Estévez, empresario de transportes que ha compatibilizado desde el 2015 el volante del camión con la alcaldía de Portas. Lo deja, y otro profesional del volante, Ricardo Martínez, le sucederá como candidato del Partido Popular en ese concello.
O Morrazo
Entre los
restantes concellos de la comarca, en Marín y Bueu, políticos más
jóvenes, pero ya experimentados, como María Ramallo (Partido Popular, 48
años) y Félix Juncal (BNG, 50) persiguen su tercer y cuarto mandatos
consecutivos respectivamente.En Ponte Caldelas, Andrés Díaz (PSOE, 42) pretende revalidar después de su primer mandato como alcalde -al frente de un gobierno tripartito- en un municipio que siempre fue feudo del centro derecha con la familia Rodríguez.
Finalmente tenemos el caso de Cerdedo-Cotobade, el nuevo concello surgido de la fusión de ambos municipios y que hoy en día es el ayuntamiento más joven de Galicia y de España. Como tal celebrará, por tanto, sus primeras elecciones locales en las que Jorge Cubela, de 30 años, buscará lograr su tercera victoria consecutiva para que el PP retenga esa alcaldía en la comarca. No obstante habrá cierto morbo con el estreno de Ernesto Filgueira, vecino de la parroquia de Viascón, empresario y expresidente de la asociación Centro Comercial Urbano Zona Monumental (CCUZM) de Pontevedra, como candidato del BNG.
QUIÉN ES QUIÉN los regidores y exregidores
El alcalde de Poio optará a un séptimo mandato
El alcalde de Caldas aspira a un cuarto mandato
El alcalde de Pontevedra lleva casi veinte años en el cargo
Recuperó la alcaldía gracias a una moción de censura
Es probable que no repita como candidato
La alcaldesa de Marín persigue su tercer mandato
El regidor se presenta para un cuarto mandato
El exregidor aspira a recuperar la alcaldía
El alcalde intentará repetir triunfo
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