La demanda de suelo empresarial en la comarca comienza a repuntar en los últimos meses, después de la paralización que provocó la crisis económica primero y el COVID después. Los índices de ocupación y venta de parcelas de las dos principales bolsas de suelo industrial en el entorno de Pontevedra, los polígonos de Barro y A Reigosa, así lo ponen de manifiesto.