Cuatro concellos arousanos tratan de aprobar sus planes urbanísticos

Algunos no tuvieron más remedio que rehacer el trabajo con la nueva Lei do Solo

Alberto Núñez Feijoo dijo hace unos días que la nueva Lei do Solo de Galicia, en vigor desde hace seis meses, reducirá los plazos para aprobar los planes urbanísticos de los concellos. Estas palabras, si se traducen en hechos, supondrán un alivio para muchos ayuntamientos. Da igual el color político de los que gobiernan en los distintos municipios de Pontevedra y Arousa. Se pregunte al alcalde que se pregunte, la respuesta es siempre la misma: «Aprobar o PXOM é o conto de nunca acabar», dicen con distintas palabras pero con la misma idea los regidores. Al engorro que suponen los trámites se suma, en muchas ocasiones, la polémica política o social que surge al tratar de poner orden en el urbanismo. Así que lo habitual es que pase el tiempo, que cambie la corporación, sin que los planeamientos den visto la luz. En la comarca de Pontevedra hay nueve concellos intentando poner fin a años de trámite para tener al fin un PXOM actualizado. En Arousa son cuatro en esa misma tesitura.

No todos los concellos que están revisando sus PXOM o haciéndolos completamente nuevos tienen los mismos avances hechos. A tenor de lo dicho por alcaldes y concejales de Urbanismo, los trámites están más que avanzados en Caldas, Bueu, Campo Lameiro, Vilaboa, Moraña, Catoira u O Grove. El regidor caldense, por ejemplo, señaló ayer que ya tienen hecha la aprobación inicial y ahora mismo están a expensas de lo que diga la Xunta. Señalaba que es importante para el municipio contar con este planeamiento para «dar seguridade xurídica a algunhas edificacións ou ampliar o chan industrial». En Catoira, el mandatario indicaba: «Agora estamos terminando, xa resolvemos as alegacións... Pero cambiaron a lei tres veces, así non se pode tirar para adiante». Desde Vilaboa, el regidor contaba qué está haciendo para conseguir los informes que les faltan : «Estamos pendentes dun único documento de Costas, así que eu chamo a Madrid cada dous días. Ata que nos fagan caso», enfatiza Poceiro.
Aunque también quieren poner al día sus planeamientos urbanísticos, otros concellos todavía van algún paso por detrás. Es el caso de Cuntis, Portas, A Lama, Ponte Caldelas, Cambados y Vilagarcía. Los gobiernos quieren aprobarlos, pero todavía les queda tramitación por delante. Algunos tenían trabajo avanzado que tuvieron que tirar a la basura para adaptar sus planeamientos a la nueva ley en vigor. Lo contaban desde Cuntis: «Tiñámolo case finalizado, pero houbo que refacer todo, e niso estamos».
Luego, hay otros dos grupos de concellos. Aquellos que tienen planes generales relativamente jóvenes y, por tanto, no ven necesario hacerles una revisión global -los técnicos irán viendo cómo casan con la nueva ley-. En ese caso están Poio, Marín, Barro, Valga, Meis, A Illa, Sanxenxo, Cesures, Ribadumia o Meaño. Y, por último, también están aquellos que tienen normas o planes más antiguos pero que, por distintas causas, no están actualmente con la revisión a vueltas. Ahí entra Pontevedra, Meaño o Vilanova. «Témolo parado, e non sei cando o retomaremos», dijo la regidora de Meaño

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