La comarca de Pontevedra cierra el año 2023 con un ligero descenso de la población, hasta los 188.085 habitantes certificados por el Instituto Nacional de Estadística (INE) al pasado 1 de enero, pero que constituye el padrón oficial para todo 2024. Son 200 menos que el año anterior, una caída que viene motivada de forma especial por la pérdida de vecinos en el municipio. El INE asigna a la capital 82.535 habitantes, 293 menos que el año anterior, el padrón más bajo de los últimos doce años.
Este descenso en Pontevedra contrasta con el aumento de la población en seis de los otros catorce municipios de la comarca, en especial en los más poblados: Marín, Sanxenxo y Poio. El primero pasa de 24.034 vecinos a 24.197, es decir, 183 más, lo que supone un hito muy destacable en una localidad que arrastra caídas desde hace años. De hecho, hace una década, en 2014, su padrón era de 25.329 personas, más de mil por encima de la cifra actual.
En cambio, Sanxenxo y Poio sí presentan una evolución al alza más estable en los últimos ejercicios. En Sanxenxo el INE certifica a día de hoy 17.854 habitantes, 94 más que el pasado año y trescientos más que hace una década, cuando tenía 17.543. En Poio se pasa de los 17.276 de 2022 a los 17.297 actuales. Son solo 22 personas más, pero certifica la ligera tendencia al alza que registra desde hace varios ejercicios.
Llama la atención, por otra parte, que los dos municipios menos poblados, y también más envejecidos, de la comarca, registren este año un aumento de la población. Es muy pequeño, pero significativo. En Campo Lameiro el censo creció en dos personas, hasta los 1.723, pero aún así son 230 menos que hace una década. Por su parte, en A Lama se pasa de los 2.499 a los 2.520, con un aumento de 21 personas. En 12014 eran 2.763. Por su parte, Barro es el sexto municipio del territorio pontevedrés donde crece el censo. Son solo 14 más, pero ya es el tercer año con incrementos para sumar ahora 3.651 vecinos. Es apenas medio centenar menos que los censados hace una década en Barro, cuando el INE certificaba 3.705.
En el resto de los municipios de la comarca se producen caídas generalizadas, en mayor o menos medida. Al margen de los 393 vecinos menos de la capital, el mayor descenso en términos absolutos se registra en Caldas de Reis, con 58 habitantes menos. Su censo actual es de 9.620 vecinos, con lo que se queda un año más a las puertas de los 10.000 habitantes, una barrera que no es capaz de superar desde hace tiempo y que le otorgaría una nueva categoría fiscal, no solo en cuanto a transferencias del Estado, sino también en número de concejales, ya que su corporación podría pasar de los 13 ediles actuales.
Vilaboa también queda por debajo de los 6.000 habitantes que sí superaba en 2022, al perder 54 vecinos y quedarse en 5.950. Son 22 menos que los 5.974 residentes de hace una década. Desde entonces ha fluctuado por encima y por debajo de los 6.000 empadronados, pero sin consolidarse nunca en esa cifra.
Por su parte, Cerdedo-Cotobade no logra tampoco aumenta su población varios años después de su fusión municipal. Tiene ahora, según el INE, 5.687 personas censadas. es un descenso de apenas diez con respecto al padrón de 2023, pero se queda lejos de los 6.187 que sumaban hace diez años los dos municipios, cuando aún no estaban fusionados.
Cuntis tampoco crece y tiene ahora 43 residentes menos que hace un año, para caer a los 4.549, cuatrocientos por debajo de los de 2014, mientras que Moraña se queda en 4.126 (siete menos que hace un año). También ha retroceso en Portas (2.823, con 28 vecinos menos) y en Ponte Caldelas, que pasa de 5.575 a 5.553 empadronados, con una caída de 22.
El PP vincula el descenso en la ciudad a los servicios y la economía local
El presidente del PP local Rafa Domínguez lamentó ayer que “Pontevedra lleve tres años consecutivos perdiendo población. Hace 12 años que no teníamos el padrón municipal tan bajo. Lamentablemente, se asocia a un deterioro de servicios y económico”. Añade que la ciudad “no está aprovechando el tirón de Galicia y está perdiendo el tren, al que otros ayuntamientos limítrofes se han subido, para conseguir un aumento de su población, en detrimento de Pontevedra”. Domínguez considera prioritario, para revertir esta tendencia a la baja, que se mejoren sustancialmente servicios básicos como la recogida de la basura y la iluminación nocturna . Otra de sus encomiendas consiste en denunciar que “los barrios y las parroquias siguen abandonados” por el Concello.
Las cifras
MUNICIPIO 2023 2024
Pontevedra 82.828 82.535
Marín 24.034 24.197
Sanxenxo 17.760 17.854
Poio 17.276 17.297
Caldas de Reis 9.678 9.620
Vilaboa 6.004 6.950
C.-Cotobade 5.697 5.687
Ponte Caldelas 5.575 5.553
Cuntis 4.592 4.549
Moraña 4.133 4.126
Barro 3.637 3.651
Portas 2.851 2.823
A Lama 2.499 2.520
Campo Lameiro 1.721 1.723
https://www.farodevigo.es/pontevedra/2023/12/27/caida-pontevedra-reduce-padron-comarca-96276285.html
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