Dos semanas después de que las calles y plazas de Pontevedra se convirtieran en el escenario perfecto para conocer los principales oficios que antiguamente se desempeñaban en la Edad Media, Barro se sumergió de lleno ayer en los torneos medievales, pues el municipio celebró la V Festa Medieval.
Una ruta cabalar, que salió desde el Pazo da Crega, dio el comienzo de los festejos a las 10 horas, mientras que no fue hasta las 12 horas cuando tuvo lugar la apertura de los puestos de gastronomía y de venta de productos de artesanía, además de aquellos stands en los que se recreaba las profesiones del medievo. Con el juego de la llave y los obradoiros de pan y de joyería de barro se iniciaron las actividades de la jornada. Los asistentes pudieron disfrutar del tiro con arco a partir de las 12.30 horas.
El momento más esperado llegó a las 17.30 horas, cuando, además de continuar con el tiro con arco, dieron comienzo las exhibiciones de diversos juegos medievales y torneos a caballo, a cargo de Cabaleiros do Salnés, con las que niños y mayores pasaron una amena tarde en .
Como colofón, los asistentes a la V edición de la Festa Medieval de Barro disfrutaron de una gran cena que estuvo amenizada por música de época. Evidentemente, los comensales asistieron con sus mejores galas para dotar de más realismo a la cita, en la que degustaron un completo menú compuesto por empanada, mejillones, calamares, pulpo, jarrete asado con patatas y ensalada, postres, café, vino y agua, y con un precio de 20 euros por persona.
A medianoche, el broche final de la fiesta llegó en el momento en el que todos los presentes pudieron disfrutar de forma gratuita de una queimada en el interior del Pazo da Crega. La ambientación musical continuó mientras los miembros de la organización procedieron a la entrega de trofeos a los vencedores de los torneos que se llevaron a cabo durante la jornada.
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