El acusado alegó que desconocía que la pérdida de los puntos le inhabilitaba para transitar por un vial público entre fincas
En pleno confinamiento por la pandemia del coronavirus, el 18 de abril del año pasado, la Guardia Civil dio el alto a un tractor agrícola que transitaba por el Camiño das Baladas, en Barro. Identificada la persona que iba al volante, los agentes comprobaron que su interlocutor carecía de permiso de conducir. Once años antes, en el 2009, la Jefatura Provincial de Tráfico de Pontevedra acordó la privación del carné por la perdida de todos los puntos y este no lo llegó a recuperar.
De hecho, y según recoge una sentencia, a lo largo de cuatro años consecutivos, entre el 2015 y el 2018, el acusado acumuló una condena por este motivo anual. A estas cuatro penas se suma ahora una nueva que ha sido ratificada por la Audiencia de Pontevedra y que le impone cuatro meses y quince días de prisión.
En su descargo, el encausado sostuvo que «desconocía que la falta de permiso de conducir afectaba a la posibilidad de conducir un vehículo agrícola, un tractor, entre fincas privadas colindantes donde ejercía su labor como peón forestal». Este extremo ya fue analizado por el juez sentenciador que concluyó que se debía partir, «como mínimo, debería representarse que era posible que a prohibición de conducir podía afectar a calquera vehículo, incluído un vehículo como o dos autos», así como que «a necesidade de ter permiso para conducir era coñecida e tamén era altamente probable para unha persoa media representarse que a perda afectaba a todos os permisos que tivese».
Recurso de la defensa
La defensa, a la hora de interponer su recurso, volvió a incidir en esta idea argumentando ese supuesto desconocimiento «en la falta de instrucción, cultura o formación del acusado y en que, aun rechazando que sea estrictamente un analfabeto, pensaba que una cosa era el carné de conducir y otra el permiso para conducir tractores». Los magistrados desestiman esta tesis manteniendo que el encausado «sabía que para conducir el tractor se necesita un permiso y, además, le constan cinco condenas anteriores por la misma actividad, lo que, de una parte, excluye el desconocimiento de los límites de la prohibición y de otra, le imponía, en caso de duda, la adopción de una diligencia mínima para comprobar si existía una posibilidad legal de conducir el tractor».
De igual modo, la Audiencia rechaza la falta de dolo porque, según sostuvo la defensa, «se habría visto obligado a conducir el tractor para limpiar una finca particular por razón de su trabajo y se habría limitado a cruzar un camino asfaltado para trasladarse a la finca colindante donde iba a trabajar».
Frente a esta afirmación, la resolución contrapone que conducía «por una vía pública (...), una vía asfaltada», por lo que «sería, incluso, indiferente si venía de un supermercado como sostienen los referidos agentes y se da por acreditado en la sentencia, dado que portaba una bolsa con la compra, o si cruzó dicho camino asfaltado para acceder a finca colindante en la que iba a trabajar, como sostiene el acusado, pues también este supuesto conforma los elementos del tipo delictivo».
https://www.lavozdegalicia.es/noticia/pontevedra/2021/11/11/condenado-circular-tractor-agricola-teniendo-carne-conducir-retirado/0003_202111P11C4991.htm
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