O marisco procedía de Portugal e descoñécese cal era o seu destino
A garda Civil, xunto aos axentes do servizo de Gardacostas de Galicia requisaron na peaxe da autoestrada AP-9 en Curro , Barro,
2.275 quilos de ameixa japónica procedente de Portugal e que se
descoñecía o seu destino. O operativo, organizado pola Garda Civil, tivo
lugar de madrugada e participaron seis axentes, que tras deter o
vehículo que transportaba o marisco, contactaron co Servizo de
Gardacostas, que incorporou cinoc axentes máis para facerse cargo da
mercancía comisada.
O
operativo enmárcase dentro dos traballos de control da baixamar nas
praias, descargas, comercialización e transporte nos portos e estradas
de Pontevedra .
http://www.lavozdegalicia.es/noticia/pontevedra/2014/04/16/requisan-dos-toneladas-almeja-japonia-control-guardia-civil-barro/00031397658543331601606.htm
Agentes de la Guardia Civil de Pontevedra, en colaboración con el Servizo de Gardacostas de Galicia, se incautaron en la madrugada de ayer de más de dos toneladas de almeja de procedencia portuguesa. La operación se desarrolló en la AP-9 a la altura del peaje de Curro (Barro), por donde circulaba el vehículo donde se transportaba el marisco, que no estaba debidamente documentado. El coche también fue decomisado y se investiga ahora el destino de la almeja.
El operativo fue organizado por la Guardia Civil de la comandancia pontevedresa, que utilizó a seis agentes en la interceptación del coche. Después se contactó con el Servizo de Gardacostas, que incorporó al control a otros cinco efectivos, y que se hicieron cargo de la mercancía aprehendida y que arrojó un peso total de 2.275 kilogramos.
Según informaron ayer la Consellería de Medio Rural y la propia Guardia Civil, se trata de almeja japónica procedente de Portugal y cuyo destino aún no se ha aclarado, si bien se especula con que se dirigiera hacia la zona de Sanxenxo, Salnés o Arousa ya que el transporte se interceptó en el acceso a la autovía de O Salnés en Curro. El marisco fue trasladado al Instituto Galego de Formación de Acuicultura (Igafa) que gestiona la Consellería de Medio Rural en la Illa de Arousa, con el objetivo de proceder a su conservación y custodia. En esas instalaciones también se procederá a su análisis para comprobar si puede ser resembrada en alguna playa con todas las garantías.
La consellería señala que el operativo de la madrugada de ayer se enmarca en los trabajos de control de la bajamar en las playas, descargas y comercialización y transporte en los puertos y carreteras de la provincia de Pontevedra, todo ello para luchar contra el furtivismo. Al respecto, hace unos días, el Servizo de Gardacostas anunció la identificación de 51 presuntos furtivos en la ría de Arousa, mientras que en la de Pontevedra los agentes se incautaron de 27 artes de pesca (la mayoría de ellas, nasas), más de 58 kilos de distintas especies y 50 metros de artes de enmalle.
Por todo ello, la Xunta alerta del riesgo para la salud que supone el consumo de marisco ilegal, sin pasar los oportunos controles, por lo que emplaza a los consumidores a no adquirir productos fuera de los cauces legales de comercialización.
Agentes de la Guardia Civil de Pontevedra, en colaboración con el Servizo de Gardacostas de Galicia, se incautaron en la madrugada de ayer de más de dos toneladas de almeja de procedencia portuguesa. La operación se desarrolló en la AP-9 a la altura del peaje de Curro (Barro), por donde circulaba el vehículo donde se transportaba el marisco, que no estaba debidamente documentado. El coche también fue decomisado y se investiga ahora el destino de la almeja.
El operativo fue organizado por la Guardia Civil de la comandancia pontevedresa, que utilizó a seis agentes en la interceptación del coche. Después se contactó con el Servizo de Gardacostas, que incorporó al control a otros cinco efectivos, y que se hicieron cargo de la mercancía aprehendida y que arrojó un peso total de 2.275 kilogramos.
Según informaron ayer la Consellería de Medio Rural y la propia Guardia Civil, se trata de almeja japónica procedente de Portugal y cuyo destino aún no se ha aclarado, si bien se especula con que se dirigiera hacia la zona de Sanxenxo, Salnés o Arousa ya que el transporte se interceptó en el acceso a la autovía de O Salnés en Curro. El marisco fue trasladado al Instituto Galego de Formación de Acuicultura (Igafa) que gestiona la Consellería de Medio Rural en la Illa de Arousa, con el objetivo de proceder a su conservación y custodia. En esas instalaciones también se procederá a su análisis para comprobar si puede ser resembrada en alguna playa con todas las garantías.
La consellería señala que el operativo de la madrugada de ayer se enmarca en los trabajos de control de la bajamar en las playas, descargas y comercialización y transporte en los puertos y carreteras de la provincia de Pontevedra, todo ello para luchar contra el furtivismo. Al respecto, hace unos días, el Servizo de Gardacostas anunció la identificación de 51 presuntos furtivos en la ría de Arousa, mientras que en la de Pontevedra los agentes se incautaron de 27 artes de pesca (la mayoría de ellas, nasas), más de 58 kilos de distintas especies y 50 metros de artes de enmalle.
Por todo ello, la Xunta alerta del riesgo para la salud que supone el consumo de marisco ilegal, sin pasar los oportunos controles, por lo que emplaza a los consumidores a no adquirir productos fuera de los cauces legales de comercialización.
No hay comentarios:
Publicar un comentario