Rara es la ocasión en la que un entrenador hace un
cambio en la primera parte. Introducir dos en la primera media hora,
insólito. Tan mal veía Luisito a los suyos que tuvo que echar mano de
Adrián Mouriño y Jandrín para corregir el rumbo de un equipo que
navegaba sin timón hacia la derrota. Con el mediocentro de O Porriño en
los mandos y el extremo asturiano en la banda, el Pontevedra salió de la
deriva para invadir aguas gijonesas. «Empezamos con un esquema
diferente, no salió bien y había que recomponer el equipo», explica el
cerebro granate. «Tener el balón y buscar más profundidad» era la misión
que les encomendó Luisito desde la banda.
Con el partido atascado y el marcador en contra, la
entrada de ambos jugadores implicó no solo la salida de unos
desacertados Bello y Queijeiro, también un cambio de esquema. «Nunca es
agradable salir al campo así porque a los compañeros tampoco les gusta»,
reconoce un Jandrín que destaca la capacidad del equipo de cambiar la
disposición táctica en función del juego del rival y del resultado.
«Manejamos varios esquemas, pasamos de una defensa de tres a un cuatro,
cuatro, dos», declara el extremo asturiano.
La rápida reacción desde el área técnica de un
Luisito que se enfundó la chaqueta de Paco Jémez -preparador del Rayo
que no duda en mover el banquillo en los primeros minutos cuando su
equipo no funciona- permitió a los granates sacudirse el dominio
sportinguista y lanzarse con descaro a por el empate. «Jandrín en la
banda es difícil de parar y yo salí en la mediapunta donde ya jugué
varios partidos la temporada pasada y me siento cómodo», explica
Mouriño. «No mejoramos porque saliéramos nosotros», puntualiza Jandrín
que se muestra convencido de que el equipo sería capaz de reaccionar sin
la entrada de refuerzos.
Sin embargo, el plan de los locales no salió como
estaba previsto y la reacción se quedó a medias. «Ellos llevaron la
iniciativa en la primera parte, pero con el empate no nos vamos
contentos», sostiene el ovetense. El centrocampista porriñés achaca el
tropiezo granate a la necesidad de los visitantes. «Ellos están en un
momento complicado y venían a por todo», recalca Mouriño que cree que
«el Pontevedra mereció la victoria».
Ambos están de acuerdo en que la tarjeta roja
mostrada por el colegiado a Borjas Martín impidió al Pontevedra sumar
los tres puntos. «En la segunda parte los metimos atrás, una pena la
roja», lamenta Jandrín que ve la decisión del árbitro «muy rigurosa».
Menos comprensivo con la determinación del trencilla se muestra Mouriño.
«Yo creo que la segunda amarilla es falta del contrario, Borjas llega
antes que él al balón», apunta el de O Porriño.
Convenio en Barro
En la tarde de ayer, la presidenta del Pontevedra,
Lupe Murillo, firmó un convenio con el alcalde de Barro, Fernández
Abraldes (BNG), en el que el Concello cederá el campo de Outeiro para
entrenar cuando el conjunto granate lo necesite.
http://www.lavozdegalicia.es/noticia/pontevedra/pontevedra/2016/04/12/jandrin-mourino-punto/0003_201604P12C9991.htm
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