Si dependiera del Concello de Pontevedra, la solución
para el nudo de Bomberos sería trasladarlo: llevarse la isla de peaje
varios kilómetros al norte, hacia el límite de la parroquia de Alba con
Barro, y allí crear un nuevo nudo que diera entrada y salida a la AP-9
en todas direcciones.
La propuesta diseñada por Fomento y Audasa no es
la primera ni la segunda opción para el Concello, pero se acepta como
vía para solucionar un problema que tiene tantos años como la propia
autopista. En 1992 se inauguraba el puente sobre la ría en medio de una
enorme polémica que había arrancado con el inicio de su construcción, en
1989, por el enorme impacto ambiental que supuso. Aquella batalla se
perdió, pero no se renunció a cambiar algún día el obsoleto nudo norte
de acceso a la AP-9.
Para ello hubo numerosas iniciativas en el
Congreso, prácticamente de todos los colores políticos -dependiendo de
quien gobernase en cada momento-, y la financiación del estudio para su
solución figuró durante varios años en los Presupuestos Generales del
Estado. Curiosamente, de las cuentas para este año desapareció la
partida, circunstancia que fue criticada desde el BNG y el PSOE en
Pontevedra, que temían que hubiera quedado en el olvido la promesa que
hizo en noviembre del 2012 la ministra de Fomento, Ana Pastor (PP),
cuando anunció que la reforma del nudo entraría en una negociación con
Audasa en la que se incluirían cinco o seis actuaciones.
En el caso concreto de este nudo en torno al
parque municipal de Bomberos, su reforma afectará a los aproximadamente
37.000 conductores que, según cifras del Concello, lo utilizan a diario.
De ahí que ayer se valorara muy positivamente el paso adelante dado por
Fomento y Audasa.
Mosquera solo pone una pequeña pega: la propuesta
no incluye el paso peatonal entre As Correntes y Bomberos, que prevén
Concello y Diputación. Un problema, apuntó, «que pensamos que é subsanable».
http://www.lavozdegalicia.es/noticia/pontevedra/2014/06/27/alrededor-37000-vehiculos-circulan-diario-zona/0003_201406P27C1992.htm
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