El accidente, que costó la vida a una vecina de Caldas, ocurrió de madrugada
A las tres de madrugada saltó la alarma en la base de Protección Civil de Valga: un Mercedes acababa de salirse de la carretera en el entorno del cruce de Sete Coros. En una curva en otro tiempo marcada como peligrosa, el vehículo se salió de la calzada por la margen izquierda, cruzando por tanto el carril contrario, e impactó contra el poste de una farola.
La fuerza del choque fue tal que la ocupante del asiento trasero del vehículo, Giovanna Frieiro, de 18 años y natural de Carracedo (Caldas), pereció. Ni siquiera llevar puesto el cinturón de seguridad sirvió para salvarle la vida.
De vuelta a casa
La joven viajaba de vuelta a casa en el coche de la madre de una amiga, Noa Vázquez. Esta, vecina de Portas, que conducía el vehículo, aún no ha cumplido un año de carné. Tanto ella como la otra muchacha que también viajaba en el vehículo, R.V.P., natural de Barro, resultaron heridas en el accidente. Ambas fueron trasladadas al Hospital Clínico de Santiago, donde permanecen ingresadas. Su pronóstico es reservado, pero, no obstante, su estado no parece ser crítico.
Domingo. Sin identificar. Una persona perdió el control de su coche. Murió en el acto.
Lunes. J. Antonio Moure, 57 años. Conducía un vehículo que cayó por un puente y volcó.
Lunes. Carmen Cesárea Santalla, 80 años. Fue atropellada por un bus escolar en Valdoviño.
Lunes. Victoria Durán, 86 años. Murió atropellada cuando cruzaba la PO-551, en una curva.
Miércoles. A.M.O., 77 años. Atropellada en la N-550. Llovía, vestía ropa oscura. No había paso de peatones.
Sábado. Alberto Favorecido, 30 años. Murió en una choque en la «curva da morte» de Rande.
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