San Breixo resiste desde el siglo VIII

La parroquia de Barro mantiene uno de los cultos cristianos más antiguos del país

El mal tiempo con el que amaneció la jornada no impidió que un año más se celebrase en el alto de San Breixo esta tradicional romería, uno de los cultos cristianos más antiguos de Galicia. Si bien se suspendieron algunos actos, como la misa campestre, o la procesión, la fiesta se celebró igualmente con la participación de los feligreses más devotos y algunos puestos de venta, que no quisieron faltar a una cita de la que se tienen referencias desde el siglo VIII.

A mediodía, después de que se suspendiese la misa campestre y la procesión, apenas quedaba una decena de puestos de venta en el entorno de la iglesia de San Breixo, en esta parroquia de Barro. El temporal con el que se levantó el día hizo que muchos romeros no subiesen este año al alto del antiguo "San Verísimo", pero aún así la romería resistió al mal tiempo y se celebró igualmente aún suspendiendo algunos actos. Poco antes de cancelarse la misa al aire libre, un poste de la luz se desplomó sobre una furgoneta de los puestos de venta y cortó el suministro eléctrico.
Pero las malas condiciones climatológicas no pudieron con uno de los cultos más antiguos del país. Así lo explica el párroco e investigador Jesús Gago Blanco, quien en un estudio sobre la historia de esta feligresía ha descubierto que existe constancia de este culto desde aproximadamente el año 700. Un documento escrito en caracteres visigóticos y que se conserva en el Archivo Histórico de Santiago, recoge que en el año 895 seis hermanos y una hermana hicieron una importante donación a este templo, que unos cien años atrás levantara su abuelo. Este dato sitúa un culto y una devoción a un santo en este lugar en torno al siglo VIII.
Se trata por ello de uno de los cultos cristianos más antiguos de los que tenemos constancia en Galicia, si bien en este enclave hubo mucho antes un asentamiento poblacional -se ha localizado un castro celta-, que como es habitual en estos casos revelan una cultura precristiana que asumió la Iglesia Católica durante la Edad Media.
Agua de la fuente
En el actual templo de San Breixo, del siglo XVI pero sobre el que se hicieron reformas y ampliaciones en 1728 y 1894, se mantiene hoy en día la tradición de beber el agua de la fuente del santo, originariamente situada en un cañaveral localizado monte arriba al Este del templo, pero que en posteriores reformas se canalizó hasta la iglesia, de modo que ahora brota de las mismas paredes del ábside.
En el trabajo que está realizando el párroco, Jesús Gago, se revela que la primera ampliación importante del templo, levantado en el siglo XVI, se encargó en 1728 al arquitecto dominico Fray Manuel de los Mártires, autor entre otros de la balaustrada y el púlpito de la iglesia de San Martiño, en Compostela. Se le pagó 150.000 reales por los planos de esta ampliación. En la fachada del templo se pueden ver aún hoy teselas e inscripciones que hablan de posteriores reformas y ampliaciones de 1737 o de 1894, cuando un rayo destruyó la torre anterior, que hasta ese momento estaba coronada por una gran bola de hierro.

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