Detienen a tres jóvenes que huyeron de la policía y Tráfico durante 40 kilómetros

La fuga comenzó en las inmediaciones de O Vao y concluyó a la entrada de la playa de A Lanzada - Al menos cuatro patrullas de la Guardia Civil reforzaron la persecución

Tres jóvenes fueron detenidos ayer en las inmediaciones de la playa de A Lanzada después de una larga y peligrosa fuga de casi cuarenta kilómetros que comenzó en las inmediaciones del poblado de O Vao, en Poio, sobre las once de la mañana. Se trató de una persecución a lo más puro estilo Berlanga, ya que los fugitivos hicieron caso omiso a las órdenes de detención que les daban desde el vehículo policial, a pesar de que emplearon indicaciones luminosas y acústicas en todo el recorrido.
Al final fueron interceptados en la playa de A Lanzada gracias a que en el recorrido se incorporaron refuerzos de la Guardia Civil de Tráfico, desde coches patrulla rotulados a los camuflados con radar.
Una vez que consiguieron detenerles en la entrada a O Grove se produjo un momento de tensión ya que los tres jóvenes fueron sacados del coche e inmovilizados en el suelo por los agentes, como explicaron varios testigos.
Los hechos tuvieron su origen en una sospecha sobre tráfico o consumo de estupefacientes ya que la Policía Nacional que vigilaba el entorno del poblado gitano de O Vao observó como un individuo se subía a un coche, por lo que decidió ir a identificarle.
Pero en ese momento, el vehículo emprendió la marcha a toda velocidad, momento en el que comenzó la persecución por la carretera N-541 en dirección a Vilagarcía.
El caso es que ni el coche de los que trataban de fugarse ni el de la policía eran especialmente veloces, por lo que el turismo en el que viajaban los tres jóvenes tenían que buscar los lugares de más riesgo para adelantar a los vehículos que les precedían y tratar de alejarse del coche de la policía.
Aunque enfilaron por la zona de A Devesa y la estación ITV de Curro donde hay doble carril de adelantamiento, el coche de la Policía Nacional tampoco fue capaz de darle alcance en esa subida.
De hecho los dos coches llegaron al alto de Curro casi a la par, eso sí haciendo adelantamientos en línea contínua con lo que hubo momentos de cierto riesgo para los numerosos conductores que en ese momento circulaban en uno y otro sentido.
Cierto que como el coche de la policía había activado las luces y la sirena, la mayoría de los vehículos tomaron las precauciones debidas cuando se les acercaban los coches implicados en la persecución, al echarse al arcén.
Cuando ya parecía que el vehículo policial podría darles alcance, el turismo en el que viajaban los tres jóvenes accedió a la autovía de O Salnés desde el enlace de Curro.
Allí una patrulla de la Guardia Civil de Tráfico que realizaba un control en la glorieta central se sumó a la persecución, con el fin de dar alcance a los tres fugados.
Poco después entraron a toda velocidad en la autovía una patrulla en un Patrol, un coche camuflado y un tercer coche de Tráfico un minuto después.
Con todo, los jóvenes que circulaban en un coche tipo berlina, de color blanco y con bastante antigüedad, lograron que en los casi veinte kilómetros de autovía y vía rápida desde Sanxenxo a O Grove no fueran capaces de hacer el adelantamiento.
Finalmente, al llegar a la entrada de A Lanzada fueron interceptados, momento en el que fueron sacados del vehículo y registrados.
En esta operación, la Policía Nacional que inició el operativo no pudo localizar ningún tipo de sustancia estupefaciente, que era el motivo de la persecución, ni de forma personal ni dentro del turismo, aunque no se descarta que en el largo trayecto pudieran desprenderse de ella. Por esta causa, la policía solo les pudo imputar un delito contra la seguridad vial del que deberán responder en un juicio rápido una vez que se convoque. Cabe señalar que debido a la alta velocidad a la que circularon hubo momentos de riesgo para el tráfico.

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