Mientras en el municipio el número de plazas se queda escaso, en algunos concellos del rural ocurre todo lo contrario. Según los listados provisionales, en las escuelas infantiles de Campo Lameiro, Cotobade y Ponte Caldelas no se ha quedado fuera ni un solo niño y hasta han sobrado plazas. Otros concellos en los que las listas de espera son muy bajas son Barro, con 3 menores; Moraña, con 7; Portas, con 14, y Vilaboa, con 16 niños.
Pese a la gran descompensación entre la oferta de plazas públicas en las escuelas infantiles y la demanda por parte de las familias, la Xunta aseguraba al inicio del período de solicitud que no tiene pensado incrementar el número ni en el municipio ni en la comarca durante esta legislatura.
Perfecto Rodríguez, gerente del Consorcio Galego de Servizos de Igualdade e Benestar, decía entonces que "se va explorando en función de las necesidades de las ratios y de la oferta que hay", e incluso supeditaba la creación de nuevos centros a la cesión de terrenos por parte del Concello de Pontevedra.
Marín y Poio
En el concello de Marín, con tres escuelas infantiles, se han quedado en lista de espera 78 niños, mientras que otros 111 ya figuran como admitidos provisionales. Por su parte, en el de Poio la diferencia es mayor, ya que la Galiña Azul de San Salvador es la única de carácter público del municipio. Por ahora, son 85 admitidos frente a 47 en espera.
Por otro lado, en la comarca de Pontevedra son cuatro los centros de carácter privado que ofertan más de medio centenar de plazas concertadas: tres están en la capital y un cuarto en Marín.
http://www.farodevigo.es/portada-pontevedra/2017/05/10/ponte-caldelas-cotobade-campo-lameiro/1676476.html
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