BARRO. La aparición de una yegua muerta en Barro provocó ayer que se disparasen las alarmas en un municipio donde el acceso de los caballos mostrencos a las zonas de cultivo ha sido el origen de varios incidentes, que se han repetido en concellos colindantes.
El equino se encuentra en la cuneta de la carretera en el lugar de Triabá, situado en la parroquia de Perdecanai, y su muerte se produjo hace varios días en otro lugar, desde el que fue transportado hasta el punto donde estaba ayer.
"Aparentemente, semella que lle pegaron un tiro, pero non podo aseguralo", afirmó un vecino. Otros, como Ramón Souto, el expresidente de la Asociación Monte Acibal, indicó que desconocía el suceso, aunque reconoció que, si se confirmase que el origen de su muerte fue un tiro, tampoco sería algo extraño.
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