La Comisión de Investigación de Accidentes e Incidentes de Aviación Civil (CIAIAC), dependiente del Ministerio de Fomento, publicó ayer un primer informe o avance preliminar del accidente que sufrió una avioneta particular en el concello de Barro hace ahora dos semanas. En dicho texto, Aviación Civil confirma que el siniestro se produjo por una parada "repentina" del motor de la aeronave, aunque todavía no profundiza en las causas que motivaron este fallo, algo que probablemente se dará a conocer en el momento en el que se publiquen las conclusiones definitivas.
Esta información preliminar detalla las circunstancias en las que se produjo el siniestro. El 26 de octubre a las 12 horas, aproximadamente, la aeronave Piper PA-28-180 matrícula EC-FRL realizó "un aterrizaje de emergencia cuando sobrevolaba el término municipal de Barro a causa de la parada del motor".
Indican también que la aeronave acababa de salir del aeropuerto de Vigo para "realizar un vuelo privado local sobre las rías de Vigo y Pontevedra con cuatro personas a bordo". "Para ello coordinó con el servicio de control aéreo una altitud de vuelo de dos mil pies", añaden. Explican que "transcurridos unos 40 minutos de vuelo el único motor de la aeronave se detuvo repentinamente y el piloto intentó aterrizar en un polígono industrial", refiriéndose al parque empresarial de Barro-Meis, que cuenta todavía con numerosas parcelas vacías y explanadas y que podrían constituir un buen lugar para realizar el aterrizaje de emergencia. "Sin embargo, "tras un primer contacto con el terreno, la aeronave prolongó su recorrido sobrevolando perpendicularmente la autopista próxima (la AP-9 en un punto muy cercano al peaje de Curro) hasta caer sobre un área arbolada adyacente a esta".
Por último, señalan que el piloto, Sergio Lloves, y los otros tres ocupantes del aparato resultaron lesionados de gravedad y que los daños "estructurales de la aeronave fueron muy importantes". El propio piloto ya había relatado días después que, al ver que no podía alcanzar el aeródromo de Godos (en Caldas de Reis), decidió intentar el aterrizaje de emergencia en el polígono de Barro-Meis, sin embargo, no pudo hacerlo por lo que decidió remontar el vuelo y aterrizar el avión frenándolo contra un pequeño muro en una zona arbolada anexa a la autopista.
Uno de los copropietarios del aparato, Obdulio Iglesias, confirmó ayer que los técnicos de Aviación Civil finalizaron ya la inspección de la nave siniestrada, cuyos restos ya están a su disposición. El aparato está completamente destrozado y "su destino es el desguace", confirmó ayer.
También expresó su satisfacción por el hecho de que los cuatro heridos, que aún permanecen hospitalizados, evolucionan favorablemente de las heridas que sufrieron como consecuencia del violento impacto de la avioneta contra el suelo.
http://www.farodevigo.es/portada-pontevedra/2014/11/08/aviacion-civil-confirma-motor-avioneta/1127635.html
No hay comentarios:
Publicar un comentario