Y no por los resultados, ni mucho menos, sino por la acción de los amigos de lo ajeno que han desvalijado por completo el campo de fútbol de San Breixo. Fueron los jugadores los que descubrieron el robo el jueves por la noche al ir a entrenar.
Los ladrones no solo se contentaron con arramplar con todo lo que se puso por delante -balones, bombines, equipaciones deportivas...-, sino que causaron importantes desperfectos. Intentaron arrancar un calentador de agua, lo que provocó una inundación en las instalaciones, así como trataron de hacerse con las tuberías.
Para acceder a los vestuarios, los delincuentes serraron candados, reventaron puertas e, incluso, llegaron a picar un agujero en la pared para llegar hasta el perno de una de las puertas. De este modo, consiguieron llegar al almacén donde se hallan las neveras, una de ellas fue completamente destrozada.
Consiguieron hacerse con unos 600 euros en efectivo y con otros 400 en que se calcula están valoradas las bebidas que se guardaban.
Para rematar la faena, y en un gesto que Vicente Cons califica de «recochineo» hacia los integrantes del Barro CF, utilizaron los aerosoles del equipo para dejar dos pintadas de mal gusto: «Gracias, payasos» y «No nos gustó el servicio».
Tras el asalto, el club pontevedrés se queda ahora en una situación económica complicada, por lo que su presidente hizo un llamamiento a la colaboración de los vecinos.
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