En lo que va de 2012, la justicia ordenó un lanzamiento cada dos días - Solo 35 se aplazaron, el resto se ejecutó o la familia abandonó antes la vivienda - El número de desalojos este año es ya superior al de 2011
Tan solo un 19% de los lanzamientos que ordenan los juzgados de Pontevedra -es decir, las resoluciones por las que se ordena el desahucio-, acaban paralizados gracias a un acuerdo entre las partes o aplazados por alguna complicación que surge en el procedimiento. La dura realidad recoge que la mayoría de los procesos judiciales que conducen hacia el desahucio terminan con el desalojo efectivo de la vivienda o inmueble.
Así lo ponen de manifiesto los datos del Servicio Común de Notificaciones y Embargos de los juzgados de la capital. En lo que va de año se decretaron en el partido judicial (que engloba los concellos de Pontevedra, Cotobade, Ponte Caldelas, A Lama y Poio) un total de 176 lanzamientos de los que un total de 87 fueron positivos, es decir, se produjo el desahucio de la vivienda propiamente dicho tras la visita de los funcionarios judiciales. En otros 54 casos también acabó consumándose el desalojo del inmueble con el cambio de cerradura a través de posesiones judiciales positivas. Sin embargo, estas son actuaciones en las que el personal del juzgado se encuentra con la vivienda ya vacía cuando proceden a realizar el desahucio. Por último, restan estos 35 casos en los que el desahucio tuvo que ser paralizado. Las razones por las que se detiene un desalojo pueden ser múltiples aunque la más habitual es un acuerdo de última hora entre las partes, normalmente el deudor y su banco, que permita aplazar el pago de la deuda.
Con todo, el secretario del Servicio de Notificaciones de los juzgados de Pontevedra, Carlos Rubido, explica que la estadística recoge todos los lanzamientos que se decretan, no solo los que se derivan de una ejecución hipotecaria. Con todo, calcula que estos son mayoría, en torno a un 65 o un 70%. El resto de los desalojos derivan de múltiples causas, desde desahucios por el impago de arrendamientos al cumplimiento de sentencias sobre separaciones matrimoniales, conflictos hereditarios o incluso para hacer cumplir órdenes de alejamiento en asuntos de violencia de género. Con todo, el impago de las letras de las hipotecas bancarias sigue siendo la principal causa desahucio en Pontevedra, dado que la ley actual permite que "en el 99% de los casos el juzgado acabe dándole la razón al banco", explica Rubido.
En cuanto a la evolución en el número de lanzamientos, Carlos Rubido explicó que en lo que va de año no se está detectando un repunte especial con respecto a ejercicios anteriores. Sí que es cierto que los 87 desalojos positivos contabilizados hasta el pasado 16 de noviembre son ya más que todos los que se produjeron a lo largo del pasado ejercicio, sin embargo, están por debajo de los 94 de 2010. El número de lanzamientos totales (176) también es menor que en 2010, cuando se produjeron un total de 192, aunque ya superan al conjunto de 2011, un total de 169. Como es lógico, Pontevedra acumula la mayor parte de los lanzamientos, seguida de Poio. En el resto de los municipios del partido judicial apenas se producen casos. Tampoco se tiene constancia de ningún desalojo violento o por la fuerza, aunque en algún caso sí se requiere la presencia policial.
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