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viernes, 29 de junio de 2012

Fomento retrotrae el diseño de la A-57 a una "fase preliminar" mientras la Xunta pide que se "agilice"

A punto de cumplirse dos décadas desde que en 1993 se puso por primera vez sobre la mesa la creación de una autovía directa entre Pontevedra y la A-52 a la meseta (que acabaría convirtiéndose en la A-57 entre la capital y O Confurco), el conselleiro de Territorio, Agustín Hernández, ha vuelto a poner sobre la mesa la necesidad de que se "agilice" su diseño y ejecución., si bien ahora uno de los puntos de partida es el enlace de Curro.

Sin embargo, los planes que maneja el Ministerio de Fomento al respecto, apuntados en marzo pasado por la propia ministra Ana Pastor, sitúan ahora la entrada en servicio de esta infraestructura en un horizonte lejano, toda vez que esta eterna actuación ha vuelto a a sus orígenes.

Pese a que los proyectos de trazado ya estaban en marcha y se habían superado la mayor parte de los estudios informativos y las exposiciones al público, Fomento acaba de admitir, en una respuesta en el Congreso, que esta autovía "se encuentra en una fase administrativa preliminar, por lo que no resulta posible establecer con rigor los plazos para la licitación y adjudicación de las obras".

Frente a este pesimista panorama, Agustín Hernández subrayó, en su visita del pasado miércoles a las obras del nudo de O Curro que uno de los "retos" de su departamento "es que se agilice por parte de Fomento la construcción de la A-57" en todos sus tramos, es decir, desde ese nudo de Curro que se abre parcialmente hoy, hasta O Confurco, en Ponteareas, con las tramos de la circunvalación de Pontevedra incluidos.

Durante la visita oficial que Ana Pastor, realizó a la capital a finales de marzo pasado, presentaba como prioritario un vial que tiene el objetivo de que "Pontevedra tenga una alternativa libre de peaje y será una autovía que estamos estudiando con su trazado correspondiente, el menor impacto posible y el coste más asumible, que nos comunique con Vigo de forma gratuita". Aunque se apuntó la posibilidad de aprovechar lo ya diseñado en los años anteriores por el ministerio, Fomento parece apostar ahora por empezar de cero, toda vez que "las previsiones sobre las actuaciones a desarrollar y calendarios de licitación y adjudicación de las obras de la A-57, quedarán establecidos en el contexto de la nueva planificación viaria que está elaborando el Ministerio de Fomento en el ámbito del Plan de Infraestructuras, Transporte y Vivienda 2012–2024, y en el marco presupuestario previsto para este y posteriores ejercicios", según se añade en la respuesta ofrecida a la diputada del PSOE por la provincia, Carmela Silva.

El retraso que supondrá esta nueva etapa de la A-57 mantiene a la AP-9 como único eje vertebrador de la provincia, por lo que Hernández relanza la idea de renegociar las condiciones de la concesión de la autopista en la que cabría una rebaja de los peajes.

En otra respuesta en el Congreso, esta vez a la diputada del BNG Olaia Fernández Davila, Fomento descarta que la futura circunvalación de la ciudad (que también forma parte de la A-57) dispone de una nueva conexión con la red viaria convencional en Tomeza. El BNG y el Concello habían solicitado ese enlace para "evitar que los conductores tengan que acudir a Vilaboa para acceder a la circunvalación".

Fomento explica que esa "conexión Sur de Pontevedra con la Autovía A-57 corresponde a un vial propuesto en la revisión PXOM, que aún no ha sido aprobado. Por ello, no es posible incorporarlo al proyecto (en redacción y tramitación), al no haber formado parte de su información pública, ni estar avalado por el planeamiento municipal vigente".

El ministerio añade que "en el proyecto de trazado se han previsto los elementos necesarios para que dicha conexión pueda ser viable en el futuro, sin que ello suponga, en principio, la asunción de la titularidad o ejecución del vial, ni del enlace correspondiente por parte del Ministerio de Fomento". Además, "la ciudad de Pontevedra dispondrá de varias conexiones con la autovía A-57: un enlace prevista en el tramo A Ermida-Pilarteiros con la N-541, y otra en el alto de A Ermida", con la PO-532 y la PO-542 (O Pino-Bora), en el límite con el tramo adyacente a la circunvalación: A Ermida–Vilaboa". Por tanto, concluye que "ni el enlace ni el vial planteados están incluidos en el proyecto del tramo A Ermida-Vilaboa, pero como se ha indicado anteriormente, sí se ha procedido a incorporar al mismo las medidas necesarias para que el enlace pueda ser viable en el futuro".

En esta respuesta tampoco se concretan ni fechas ni calendarios ni plazos para una circunvalación que la ministra calificó en varias ocasiones de "imprescindible".
Un plazo máximo de seis meses para redactar el proyecto de trazado y de impacto ambiental de la variante de Alba

Desde el pasado 8 de junio, día en el que se firmó definitivamente el contrato de adjudicación, la empresa Ingeniería del Noroeste S. L. dispone de un máximo de seis meses para redactar el proyecto de trazado y de impacto ambiental de la obra "conexión Norte de Pontevedra: PO-531-N-550", es decir, la variante de Alba que unirá las carreteras de Vilagarcía y Santiago y que el Concello considera como el inicio de la ronda urbana por el Norte.

Apenas unos días después de esa adjudicación, por 49.765,80 euros, el propio Agustín Hernández anunciaba a los vecinos que este trazado estaría listo "antes de que finalice el año". Incluso el proyecto constructivo del tramo entre la carretera de Vilagarcía (PO-531) entre Alba y Curro estará aprobado dentro de este 2012. Sin embargo, el proyecto de ampliación de la PO-531 se aplaza, de modo que aún no se sabe como quedará el nudo pequeño de Curro.

Sí se prevé un nuevo vial entre Alba y Curro, cuyo proyecto constructivo se habrá aprobado antes de que finalice el año. La actuación conocida como variante de Alba se llevará a cabo a lo largo de 850 metros y complementa la mejora de la capacidad de la PO-531, entre Pontevedra y Curro, que en un futuro se transformará en una vía urbana, con el objetivo de compatibilizar el tráfico con la actividad existente en sus márgenes, según explicó el conselleiro.

Tras la apertura hoy del macronudo de Curro, queda por resolver cómo se ejecutará el nudo pequeño, cuyo diseño se deja para el final para adaptarse a las conveniencias de los vecinos de esta parroquia de Barro. "Queremos hacer el mejor diseño para ejecutarlo en los meses que restan hasta final de año", explicó el conselleiro.

El segmento que enlaza la parroquia de Alba y el nudo de Curro pretende minimizar la afección a las propiedades privadas, mientras que la variante de Alba, por discurrir por núcleos más poblados va a ser estudiado con especial atención.

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