El enlace del nudo de Curro con la autovía de O Salnés se abrirá el próximo mes y sus otras conexiones, en agosto

La consellería de Medio Ambiente, Territorio e Infraestructuras prevé que el nudo de Curro esté listo también el próximo mes, para dar conexión a la autovía de O Salnés. Sus otros enlaces, con la carretera de Vilagarcía, PO-531, o la futura autovía A-57, de titularidad del Ministerio de Fomento, estarán en agosto. "Estamos trabajando para dar prioridad al eje de comunicación de la autovía de O Salnés", explicó ayer el conselleiro de Infraestructuras, Agustín Hernández, quien anunció que a lo largo del mes de agosto se podrán terminar todos los ramales de comunicación de esta obra.

Esta actuación supone más de 15 kilómetros de nuevos viales –recordó el conselleiro– mientras que la obra del propio nudo se extiende a lo largo de más de un kilómetro de longitud, con dos glorietas.
La obra que está ejecutando la Xunta de Galicia en este nudo tiene un presupuesto de 39 millones de euros. Se trata de una de las actuaciones más ambiciosas de cuantas se están acometiendo en Galicia en la actualidad en materia de carreteras, pues en el futuro conectará tres autovías, una autopista y varias vías locales con una red de pasos inferiores y puentes.

En las inmediaciones de este "macro nudo", en los tramos donde el volumen de viviendas sea bajo se instalarán dos carriles en distinto sentido (un sentido Vilagarcía y otro sentido Pontevedra) más uno para vehículos lentos en dirección a Vilagarcía. En los tramos de gran densidad de población se instalarán aceras a ambos lados de la carretera que contará con un carril a cada lado, separado por una mediana peatonal.