Las motos rugen en honor a Juan Ogando en Barro y Moraña. Video incluido.

MORAÑA. El 28 de marzo de 2012 es una fecha que la familia de Juan Ogando nunca podrá olvidar. Fue ese día cuando el joven morañés perdió la vida tras declararse un incendio en la fábrica de puertas Comercial Vilanova, en Curro (Barro), donde trabajaba. Su fallecimiento fue un duro varapalo para sus amigos y allegados, quienes, un mes después del triste suceso, se reunieron ayer para rendirle un sentido homenaje. Fue un acto sencillo, en el que las motos, su gran pasión, tuvieron un gran protagonismo.

La iniciativa, impulsada a través de la red social Facebook, reunió en la iglesia parroquia de San Lorenzo a más de 200 personas, llegadas desde diferentes municipios de la provincia de Pontevedra. Muchos de ellos no tuvieron la ocasión de conocer a Juan, pero les unía al joven su pasión por el motociclismo, de ahí que no quisiesen faltar a la cita. «Que haya venido tanta gente ha sido un detalle precioso. Estamos muy agradecidos», señaló ayer Isaac Márquez, amigo de Ogando y uno de los principales impulsores de este homenaje.

Los primeros momentos de emoción se vivieron en la propia iglesia de Moraña, donde se celebró una misa en memora del joven. Desde allí, los asistentes completaron una pequeña ruta en moto, que les llevó hasta la fábrica de Curro. Los participantes, muchos de ellos visiblemente emocionados, depositaron allí una flor en su recuerdo.

Los motores de las máquinas también se dejaron sentir justo antes de que las más de 150 motocicletas pusieran de nuevo rumbo a Moraña para completar los actos de recuerdo. La segunda parte del acto tuvo lugar en el cementerio en el que reposan los restos de Juan Ogando. Allí también se depositaron flores en memoria del joven.

Video cedido e elaborado por Jordi Varela García na honra de Juan Ogando Ruibal, o seu amigo.