Dos de los heridos en el incendio de una nave en Barro siguen muy graves y tres ya recibieron el alta

Los vecinos del lugar de Curro, en Barro, siguen pendientes de la evolución de dos de los siete heridos el miércoles en el incendio que afectó a la fábrica de maderas "Comercial Vilanova" y que deja además el trágico balance de un operario fallecido, Juan Ogando Ruibal, de 33 años y vecino de Moraña, quien será enterrado hoy. Y es que dos de los trabajadores heridos, J. C. F.S., de 41 años de edad; y F. C. P., de 45, permanecen hospitalizados en estado muy grave. El primero se encuentra en la UCI del Hospital Povisa de Vigo, sufre quemaduras de segundo grado y tiene fracturadas las dos piernas. A mayores presenta síntoma inhalatorio por haber respirado humo. El segundo, F. C. P., está hospitalizado en el Complejo Hospitalario Universitario de A Coruña y presenta quemaduras de tercer grado en el diez por ciento de su cuerpo, sobre todo en la cara y en las manos, así como intoxicación por humo. Aunque su estado es muy grave, su situación es estable.

Otros dos heridos en el incendio continúan hospitalizados en Pontevedra y Ourense aunque en mejor estado que sus compañeros. En Montecelo permanece en planta J. C. P. de 46 años quien se encuentra estable. En la ciudad de la Burgas seguía ayer en observación A. T. C., de 37 años, pendiente de la evolución de una contusión torácica que presentaba, aunque no se descartaba que pudiera recibir el alta a lo largo de la jornada.

Los facultativos del CHOP ya dieron de alta a otro trabajador herido, de 49 años, así como el dueño de la empresa y a su hija que tuvieron que ser ingresados y recibir asistencia médica al sufrir sendas crisis de ansiedad a consecuencia de la tragedia.

Por otra parte, los bomberos de O Salnés continuaban ayer tarde, más de 24 horas después de que se iniciara el incendio tras una explosión, realizando labores de extinción en la nave afectada. La gran cantidad de combustible que hay en la nave (principalmente palés de madera) hace que sea necesaria una vigilancia constante. Tras horas de trabajo intenso, un grupo de los bomberos relevó al turno anterior y siguió sofocando los rescoldos y los rebrotes tras remover parte del escombro con una excavadora. Con todo, aseguraron que "ya no hay peligro" para las viviendas adyacentes. El fuego deja graves daños en la nave cuya estructura se ha visto afectada seriamente por el fuego y las altas temperaturas. "La mitad del tejado de la nave se vino abajo", explican los bomberos, y en el interior se acumula una ingente cantidad de material y maquinaria calcinada, además de camiones y turismos que fueron pasto de las llamas.

La Policía Judicial de la Guardia Civil también visitó las instalaciones para intentar aclarar las causas del incendio. Por el momento todo lo que se sabe acerca del origen del siniestro son los testimonios de los propios trabajadores que centran el inicio del fuego en la explosión de una caldera. "Escuché un enorme estallido y de repente todo se cubrió de una gran humareda negra", explicaban el miércoles algunos testigos del siniestro a FARO.

El fallecimiento de Juan Ogando causó un hondo pesar en Barro y en Moraña. Fueron muchos los amigos que dejaron palabras de cariño y reconocimiento en las redes sociales para un auténtico apasionado del mundo del motor y las motos.